
Papá Noel vive en Laponia, una región al norte de Finlandia. En su tierra magica, entre la nieve blanca, se encuentra su oficina postal. Los elfos ponen un sello único e inimitable sobre todas las cartas; este sello pertenece solamente al pueblo de Papá Noel.
La Laponia es una tierra muy especial. En pleno invierno, o sea durante el período de la noche polar, el paisaje es iluminado por la luna, las estrellas y también por las magicas auroras boreales y por un blanco manto de nieve pura. El Círculo polar ártico es también conocido como la forntera de la frenética vida de todas las días: un lugar donde el tiempo tradicional se transforma en ell tiempo magico de los elfos y de los renos.
La Finlandia tiene una cultura muy tecnológica, tambièn Papá Noel se ha hacido seguidor de la tecnología! Aquí el aire es puro y la naturaleza es un elemento muy importante por los finlandés y jugar en la nieve, blanchisima, es una verdadera diversión y lo saben bien tambièn los elfos de Papá Noel . Resbalar por el pequeño trineo entre el centelleo de los abetos engendra alegres carcajadas.
Los ayudantes de Papá Noel son muy molestos y se muestran a las personas solamente cuando lo desean!
Diferentemente de nuestro país, las estaciónes en Laponia son muy particulares:
El invierno es largo y obscuro y està siempre nieve. El sol no sale nunca: se queda abajo del horizonte. En cualquier parte baja una obscuridad azul. Este fenómeno se llama Kaamos y verlo es una experiencia muy bonita y extraordinaria. La luna, las estrellas y, a veces, magníficas auroras boreales, iluminan el paisaje. La nieve blanca refleja la luz. La temperatura puede bajar hasta -20°C -40°C. De todas formas, se puede quedar tranquilamente al aire libre para hacer una cabalgada en el trineo o para esquiar en la selva, a condición de que, en estos casos, se llevan ropas invernales muy calientes.
Durante esta estación se puede asistir al fenómeno de l’Aurora Boreale, se puede mirar de noche, cuando el cielo está límpio. Según una leyenda antigua, l’Aurora Boreale aparece en el cielo en el mismo momento en que un zorro recorre entre los declives y su rabo golpea un montón de nieve que exhala estelas.
Después del largo invierno, los capullos se hacen verdes con mucha rapidez. Los días splenden cada vez más. El sol se levanta y derrete la nieve.
Ya desde muchos días antes del solsticio de verano hasta la primera semana de julio, en Laponia se puede asistir al fenómeno del sol de medianoche. Verdederamente acì! El sol no tramonta en absoluto. Las noches sin obscuridad con los días muy luminosos estan muy especiales. En verano se puede nadar en los lagos y en los ríos. La pesca está un pasatiempo muy popular. El verano en Laponia es bastante corto y a veces la temperatura puede alcanzar +25°C. Las lloviznas veraniegas son necesarias para limpiar el aire y la naturaleza.
Después de un verano corto,llega el otoño y entonces la naturaleza se teñe de magníficos colores purpúreos. Hacer excursiónes entre los declives de la Laponia durante la “ruska” de septiembre es una experiencia encantadora.